11 julio, 2008

Enseñar la lengua, ese segmento de convivencia

(Galería de volterianos)



Y van... No hay manera, al parecer, de que las fuerzas del Bien se lean los papeles antes de criticarlos. La ministra de Defensa se ha sumado hoy al coro con expresiones impresionantes. Véase la muestra:

Ella es partidaria de que se permita "dar todas las lenguas españolas", entre las que se encuentran "también" el castellano, el euskera y el gallego. Puede parecer que la ministra confunde las preposiciones. Repitamos: no se trata de la enseñanza 'del' español, sino de la enseñanza 'en' español. Parece que habla de Cataluña, puesto que da por hecho que se enseña 'el' catalán y es partidaria de que también se enseñen el castellano, el euskera y el gallego.

Sostiene Chacón que la lengua ha sido "un segmento de convivencia como ningún otro en Cataluña". Y sostiene más:

"Un empresario, si puede contratar a un chico que habla castellano y habla catalán y a un chico que sólo habla castellano, pues contrata al que habla castellano y catalán".

Todos los jóvenes al finalizar la educación general obligatoria conocían el catalán y el castellano "al margen de lo que se hablara" en cada casa, y estaban preparados para "acceder por supuesto a todos los puestos de la Administración pública y trabajar en cualquier lugar".

¿Cuál es la función de la Educación para la ministra de Defensa? Enseñar la lengua. ¿Cuál es el pasaporte a la clase dirigente en Cataluña? El conocimiento del catalán. ¿Cree la ministra que los empresarios catalanes no preguntarán a quienes aspiran a un puesto de trabajo: "Y usted, además de hablar catalán, ¿qué más sabe hacer? Es que yo necesito un analista financiero". Es probable que incluso en la Generalitat necesiten funcionarios con saberes y habilidades específicas.

Podría parecer que Carme Chacón nos está enseñando la lengua. No. Debe de ser que en la vida, en general, procede por inmersión y esto es una muestra del tradicional laconismo del lenguaje castrense. O un problema derivado de estar gobernados por una tropilla de gente que no ha cotizado un año a la Seguridad Social, no ha sufrido una inmersión en el mundo del trabajo.


No hay comentarios: